Modificando modismos

Parece que hay momentos en los cuales se nota la mas la necesidad de una presencia.
Una presencia certera que llene momentos, momentos que llenen mas que espacios vacíos, momentos que hagan un compartir.
Hoy, mientras me preparaba la cena pensaba, "cuanta calma, cuanto silencio, cuanta soledad que hay en este ambiente... me gusta o me disgusta?"... Solo se que estoy bien.Por ahora.
Y en ese preciso momento me repicó un tema de Jorge Drexler, que habla del "Antes"...
Antes de ciertas cosas que me fueron pasando a lo largo de un buen tiempo, voy pensando y modificando ciertas formas de ver las cosas, de actuar, de pensar y decir.
Como el hecho de dar pasos adelante, como el hecho sorpresivo de medir cada acto seguido de una palabra que se haga verbo o adjetivo.








No se si es duda, la palabra exacta, pero supongamos q sea duda. Dudo antes de decir las cosas por no querer escuchar replica ante ese comentario.
Y ahí me encuentro esperando una respuesta.
Y ahí encuentro el problema... Cosa que Antes no encontraba tan rápidamente...
Me encuentro conmigo. Con alguien que se encuentra en su soledad diaria, y que se irrita ante un planteo o un cargoseo mimoso. Pero que en cuento no encuentra ese cargoseo también se irrita.
Si bien aun no encuentro el equilibrio entre lo justo y lo ausente. Tengo muy en claro que de cada acto de cada consecuencia y de casa causa aprendo a dar pasos nuevos.
Un paso a la vez. Para seguir viviendo sin depender de una presencia que llene espacios.
Modificando modismos adquiridos de mis generaciones pasadas... padres, abuelos.
Culturas podrían llamarse, que nada tiene que ver con la cultura o con ideales con los cuales hoy yo me encuentro en el mundo diario.
Por eso hoy me veo complicada al momento de elegir una presencia con quien compartir algo mas que una sábana...
Una charla, una siesta, un abrazo, un beso.
Creo que cada uno es dueño de sus espacios, y que si no aprendo a disfrutar de mis espacios de soledad adquirida en este periodo, dificilmente pueda aprender a disfrutar (disfrutar entiendase sin reclamo de mi parte ante la primer señal de independencia de la otra parte) aprender a entender y aprender a esperar en compañía.
Para tener una compañía, primeramente hay que aprender a estar feliz con la soledad.
Estoy en ese periodo, adaptandome a los cambios, a los pasos. Al tiempo. A la realidad.

Mi realidad hoy es muy diferente a la que creía ser.
Mi realidad hoy es un antes de alguien y un después de otro ser.
Hay huellas, que con el tiempo iré puliendo hasta limpiarlas en su totalidad...
Esas huellas denotan risas, momentos, llantos, dolor y también Olvido.
Pero esas huellas también son de momentos vividos, de los cuales no me arrepiento del mas mínimo detalle.
Si hoy pudiera modificar algo de esas huellas le quitaría solo los autores. para que de esa manera el olvido llegase pronto. Pero, no puedo engañarme, de nada sirve borrar lo vivido si no adquiero el aprendizaje que hoy tengo.
Asique opté por hacerme cargo día a día de esas huellas, e ir solo modificando la gravedad que le doy yo a cada acto provocado por un desborde de Devoción .

Leí por ahí que de nada sirve depender de alguien ni necesitar a otro ser para estar plenamente feliz.(entiendase ser por ser humano, en este caso del sexo masculino)
Hoy puedo dar fe que la felicidad no pasa por el estar acompañado.
Pero si por una buena compañía a mi lado que sepa y quiera compartir conmigo momentos de mi vida por mi elegidos.

Si todo este aprendizaje llega después de cada gran amor.
Bienvenidos sean los desamores y espero enamorarme mil veces mas y así mil veces mas volverme a desenamorar.

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